Martina con vistas al mar y Martina en tierra firme

    ¡Hola a todos! Después de un tiempo sin poder escribir nada en el blog, aunque sin parar de leer, al final he podido sacar un hueco y  que mejor libro para hacerlo que con Martina. Elisabet Benavent, escritora de horizonte Martina, me ha fascinado por su fluidez a la hora de escribir y, sobre todo, por todo lo que logra transmitir con estas dos historias: sinceridad, originalidad, realidad, entre otros muchos aspectos positivos que hacen que no puedas dejar de leerlos.
    Martina es una chica normal, aunque ella se considera un poco cyborg, ya que es incapaz de mostrar los sentimientos como una persona "normal" lo haría. Además, no es muy social que digamos. En esta historia también aparecen una serie de personajes que acompañaran a Martina durante todos sus miedos, alegrías, momentos de duda y de estar perdida. Estos personajes son Amaia, una de las mejores amigas de Martina y una chica muy especial que tiene un gran sentido del humor, pero una obsesión que la hará llegar a hacer cosas que afecten a su vida en todos los sentidos. La otra mejor amiga de nuestra protagonista se llama Sandra y es, físicamente, perfecta y con una vida de ensueño que de un momento a otro se vio truncada. Javi es el amigo "gay" de Amaia y compañero de trabajo en el hospital donde ambos trabajan. Fer fue el novio de Martina durante 10 años y uno de sus profesores. Pablo Ruiz es un chef un poco especial, un enamorado del amor y propietario del restaurante el Mar, donde sucederán una serie de hechos que harán que la vida de Martina de un giro de 180º, así como la vida de todos los personajes que acompañan a nuestra protagonista. Todos estos personajes están unidos por una serie de situaciones que originaran las historias más divertidas y a la vez más emocionantes, y todas ellas serán muy cercanas a la realidad.
    En mi opinión ambos libros son como un aire fresco dentro del mundo de las historias de amor, pues no son situaciones idealizadas, sino que se acercan mucho a la realidad y muestran el lado más humano de las personas llegando a emocionar al lector en muchas partes de la historia, a despertar sentimientos de verguenza en otras y, sobre todo, a propiciar que el lector se ría a carcajadas en muchas partes con las ocurrencias de Amaia y los comentarios dichos a bote pronto por muchos personajes. Asimismo, muchas de las situaciones hacen que te enamores del amor y que sientas que todos tenemos sentimientos, aunque algunos no los muestren tan abiertamente como otros. En definitiva, son dos novelas muy recomendables que harán pasar un buen rato a quien las posea. ¡Adentraros en el mundo de Martina!